Por allí andaba Diego, que era un calavera, que se dejó asesorar por la muy guapa y exuberante Diana, y juntos emprendieron su recorrido solitario y amoroso por la Bajada de las Angustias, lejos del mundanal estruendos. Y allí junto a la cruz de piedra se desarrolló esa escena final amorosa en la que Diego se apercibió con quien se encontraba. La joven, por dejar la elegante falda un tanto subida sobre el zapatito de raso, en lugar de ver un pie de mujer vio una peluda pata de cabra. En un alarido Diego se abrazó a la cruz, quedando grabada su mano, mientras que la satánica joven desapareció entre un torbellino de humo y llamas, oliendo a azufre. Casas colgadas de Cuenca Cuenta una vieja historia de historia legendaria que en la ciudad de cuenca vivía un joven cautivador que era hijo del oidor de la villa.
Antes de partir a la guerra, Julián y Angustias se prometieron amor eterno y fidelidad ante el cristo que allí se situaba, donde se amaban cada día,junto la ventana de ella. Concluyeron no pensar en otro amor mientras transcurría la guerra, a fin de que, a la vuelta de Julián, pudieran casarse y continuar juntos. No obstante, con el pasar de los años, Angustias decidió rondar a otro muchacho llamado Lesmes y flirtear con él, olvidándose de Julián.
Un día llegó a la ciudad una mujer verdaderamente preciosa. Muchos eran los jóvenes que trataron de cortejarla, pero no lo lograron. Como tiende a suceder en este tipo de ciudades, Cuenca tiene un elevado número de historias y leyendas que han ido pasando de generación en generación. No te preocupes ya que te daremos todas y cada una de las claves a fin de que te des cuenta esta asombroso historia. Julián era un hombre de familia humilde, cuyo trabajo es ser joven.
4 Leyendas De Cuenca En El Entorno Del Santuario De Las Angustias
El fiel Andrés no faltó ninguna noche a la cita con su Rosarillo, pero por el momento no se atrevió a bajar a la plazoleta de los Franciscanos Descalzos. Los 2 enamorados hablaron sobre lo que sucedía y eligieron contarlo a sus amigos, que creyeron que se encontraba desquiciado. Relata María Luisa Vallejo que el imaginero, tras su reconversión, se despidió de Diego de Tiedra y entró en el convento y “como recuerdo de gratitud al milagro doble de su salvación, labró la cruz de piedra”.
Angustias fue la mujer a la que amaba, una dama de familia noble. Se conocieron y enamoraron en la Ronda del Huécar, tras la reja de entre las ventanas de la vivienda de ella, ubicada en el hermoso rincón del que charlamos. Los padres de Angustias no estaban conformes con este romance debido a las diferencias de clases sociales. Pero Julián deseaba probar que era digno del amor de la joven. Y es que llegó a la ciudad una muchacha llamada Diana proveniente de otro sitio. Una forastera de lo mucho más hermosa que atraía las miradas, tanto de hombres como de mujeres.
Y como no podía ser de otra manera, asimismo había llamado la atención del hijo del oidor de Cuenca. Pero, ¿sabías que aparte de todo esto Cuenca es también un espacio lleno de leyendas? Y entre todas y cada una ellas destaca la leyenda de La Cruz del Diablo. Una historia de historia legendaria que tiene de todo y que va a poder hacerte disfrutar de espacios que jamás habrías podido imaginar.
Páginas Legales
Su rostro palideció al conocer que, en vez de una pierna, Diana tenía una pezuña y una pata de cabra. La escena era tan demasiado dantesca que Diego quedó aterrorizado. Y sucede que la preciosa joven era ni más ni menos que el Demonio, que soltó unas carcajadas que aún retumban en el lugar de acercamiento. No contaba con que iba a desatarse una gran tormenta, donde los truenos y los relámpagos eran los auténticos protagonistas. A pesar de todo, Diego acudió a la cita y se encontró con ella, que lucía un bello vestido. Comenzaron a besarse y, en el momento en que el joven empezó a levantar la falda de su enamorada, cayó un rayo de forma súbita.
El joven herido entregó a la joven dama un puñado de monedas de oro que tenía en el bolsillo como obsequio de bodas, puesto que aquella misteriosa mujer era su prometida, con la que tenía planeado contraer matrimonio. Le propuso que con aquel dinero mandase crear una cruz en aquel lugar donde por última vez había abrazado y acariciado a su amada. Allí hallaron los inertes cuerpos de los bravos defensores y entre ellos el de un joven soldado que estaba agonizante. El padre Francisco Buenaventura, guardián del convento, ordenó que se llevaran al herido hasta la sede monacal para prestarle los primeros auxilios, siendo lavadas sus heridas con vinagre. Me ha dado gusto bastante el libro, lo cierto es que está súper bien escrito y llama la atención del lector.
La Historia De Historia Legendaria De La Cruz Del Demonio
De este modo, acicalado y hecho un galán, se encaminó al lugar en el que había quedado con su amada. Un día, en la víspera del día de Todos los Santos, el joven recibió una carta. Era de su deseada Diana quien lo citaba en la puerta de la Ermita de las Angustias. Y éste, que estaba desesperado por no conseguir lo que tanto anhelaba, recibió con gran alegría lo que en la carta le decía la joven. Cuenca Pero lo que no sabía era que Diana era muy inteligente.
Esta Se Encuentra Dentro De Las Historias Mucho Más
Además, su entorno está plagado de rincones llenos de hermosura. Una fuente con agua vigorosa, pues si tomas de ella te echarás pareja. Y muchos espacios llenos de vegetación en los que pararte unos segundos y deleitarte en tu visita.
En el caso de que seas un apasionado de estas historias de origen ancestral, te recomendamos una visita a esta extraordinaria ciudad. Hay otra curiosa, pero menos conocida historia de historia legendaria en el entorno de las Angustias, según publicaba Heliodoro Cordente en Gaceta Conquense en el trabajo que se titula “Las leyendas de la Cruz de los Descalzos”, inspirada en un suceso real. “Dorito” sitúa la leyenda en el mes de agosto del año 1706, cuando las tropas inglesas del general Hugo Widdham sitiaron Cuenca. Cinco mil ingleses peleando contra los ciudadanos, parapetados en la encastillada localidad, en su fortaleza y rincones.