«El término ‘leyenda negra’, que hace 25 años, con los fastos del 92, yo creía fallecido, sigue vivísimo», cuenta García Cárcel. Estas guerras le conllevan problemas económicos que lo llevan a subir impuestos, ocasionando críticas y enemigos. «En el momento en que en 1592 vuelve de las Cortes de Aragón con la salud bastante tocada, va al Escorial y por el momento no sale de allí prácticamente. Múltiples historiadores e investigadores relacionan la leyenda negra antiespañola y anticatólica, con su contracara, la «historia de historia legendaria blanca» , «leyenda rosa» (García Prisión) o «dorada» (Blasco Ibáñez, Juderías), propagandista de las conquistas de la España católica. Esta otra leyenda es defendida por numerosos autores pro-españoles de países como Inglaterra e Italia, que resaltan valores españoles como la astucia, la prudencia, el cariño a la patria, etcétera., así como por los propios españoles, que exaltan la lengua, la civilización y la monarquía de Felipe II.
Hoy en día, cuando la propia identidad de España se pone en entredicho, la leyenda negra ha vuelto a la palestra con nuevo interés. No tanto por razones históricas sino más bien, mucho más bien, por motivaciones políticas. Hay quienes, empeñados en crear, o inventar, una situación histórica opción alternativa, acuden a ella para enseñar las veleidades de una nación que, por alguna extraña razón, no piensan suya y aborrecen. La leyenda negra les sirve para hacer estereotipos sobre los que montar sus pretensiones políticas y contraponer utopías independentistas frente a un pasado en fachada tenebroso y opresor.
La Vida Privada De Felipe Ii
En la historia, Felipe II se casó con la prometida del príncipe gentil, Isabel de Valois. Este noble heredero deseaba imponer la tolerancia al calvinismo, y otorgar la libertad a los Países Bajos. Aparte de ello sostenía relaciones con la Reina Isabel, disgusta con su marido, el intransigente Felipe II. El caso es que les se dan cuenta, y Felipe le encierra bajo la influencia de la Inquisición que quiere matarlo. Corren a por él, y antes que el desafío comience, emerge Carlos V de su tumba y se lo lleva sellando la entrada. De esta forma, vemos como normalmente los que le acusaban de ello no eran mejores, y de manera frecuente peores. Lo cierto es que Felipe II era formidablemente intransigente como cualquier rey de su época, incluido su padre, aunque este tiene muy buena prensa.
Sea como fuere, es deber de historiador poner la realidad sobre el asunto, y que el lector decida. La cosa es que el gran mérito de Isabel I frente a Felipe II es subsistir a través de golpes de suerte, ya que fue una absoluta imprudencia declararle la guerra, decapitar a María, etc. La diferencia entre ambas potencias es que Felipe reconstruyó su armada en menos de cinco años, en cambio Inglaterra estaría los próximos treinta atada de pies y manos en la escena en todo el mundo.
Y no hay que olvidar que Carlos V si fue condescendiente en Alemania es pues su poder ahí era más nominal que real, y que fue el primero en ofrecer la orden de exterminar aquellos cultos luterano-luministas de Valladolid y Sevilla. Acusando el Imperio de fanatismo y crueldad mediante la Santa Inquisición y denunciando atrocidades cometidas por los españoles en la conquista de América. La revistaCuadernos de Historia Contemporánea, para promover el trueque global del conocimiento, facilita el acceso sin limitaciones a sus contenidos desde el momento de su publicación en la presente edición electrónica, y por eso es una gaceta de ingreso abierto. Los auténticos publicados en esta revista son propiedad de la Facultad Complutense de La capital de españa y es obligatorio citar su procedencia en cualquier reproducción total o parcial.
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Y es que lo que preocupaba a muchos era el expansionismo español, al ser este el primer Imperio Global. Igual que Europa jamás aceptó a Luis XIV, Napoleón Bonaparte, o a la Reina Victoria de Inglaterra, tampoco toleraría a Felipe II. El almacenamiento o ingreso técnico es requisito para crear perfiles de usuario para mandar publicidad, o para rastrear al usuario en una página o en múltiples web con objetivos de marketing afines. El almacenamiento o ingreso técnico que se emplea de forma exclusiva con fines estadísticos anónimos. Sin un requerimiento, el cumplimiento voluntario por la parte de tu Proveedor de servicios de Internet, o los registros adicionales de un tercero, la información guardada o recuperada sólo para este propósito es imposible utilizar para identificarte.
De 127 buques 37 fueron al fondo del mar De este modo Inglaterra se salvó de la invasión de España. Y también Isabel I creyéndose vencedora de la guerra, preparó junto a Drake y Hawkins, temibles corsarios la Contraarmada. Tras esta degradación intentaría buscar a Juan de Austria, su tío, bastardo de Carlos V. Hablando con él, le solicitó un barco para llegar a los Países Bajos y hacerse con el poder.
En el caso de Inglaterra, en el momento en que subió al poder Isabel de Tudor y se convirtió al anglicanismo, no comenzó la guerra contra ella. De hecho ni siquiera en el momento en que ella prestaba acompañamiento a los rebeldes de los Países Bajos, o pagaba corsarios para saquear sus navíos, atacó, no movía un dedo. La cosa era que con las cartas de Guillermo de Orange la población civil de los Países Bajos se animaba a levantarse contra esa nación imperialista y maldita. Y los protestantes franceses lucharían contra los católicos de su país siendo estos apoyados por España.
Otra régimen se entrega a la tercera parte, la dedicada al “mito” de Felipe II. Pocos reyes de España fueron cubiertos por un mantón polémico tan abultado. Y lo más llamativo es que no solo no ha desaparecido, sino parece incrementarse con el pasar de los años. El recuerdo y con él los juicios sobre el rey, como bien recoge Martínez Ruiz, arrancan desde el mismo reinado, en el momento en que se confrontaron en una guerra de opinión sus oponentes y el propio monarca. La colisión entre una imagen denigratoria y otra laudatoria fue paralela a la acción política y las batallas bélicas y lo atrayente es que se mantuvo tras la muerte de Felipe II, en el terreno de la memoria y de la fabricación de relatos con otros intereses.
Felipe Ii Y La Leyenda Negra
De hecho, en su obra, Guillermo de Orange nos entera de una relación apasionada entre Felipe II y su sobrina Ana de Austria que llevó el rey a planear la desaparición de su mujer y de su hijo para poder casarse con ella. Explica que al conocer una relación intima entre los 2, aprovechó la situación. De esta forma, tras enviudarse ha podido hallar la Sante Sede con el motivo de la falta de sucesor y establecer la relación tan deseada con Ana de Austria. Ni se le puede llamar ‘el demonio del Sur’ ni tampoco corresponde al calificativo positivo e idílico de ‘rey sensato’», continúa.
Se impuso una imagen como rey severo, austero, y, para algunos, un dogmático recalcitrante. Incluso entre los españoles caló lo de rey intransigente, siniestro, taciturno y poco humano, y eso hay que al desconocimiento y a la historia de historia legendaria negra. Pero la historia la ganó la historia de historia legendaria negra, alimentada por tres concretes que García Cárcel examina con detalle en su volumen.
De la Inquisición, si bien merecería por sí sola un producto, la verdad es que sus cifras de fallecidos son bajísimas para la época. Lo que horrorizaba a los extranjeros era ese apoyo estatal, esa maquinaria real que la transformaba en el obscuro brazo armado del Reino. «Hoy, en los ambientes historiográficos, la leyenda negra se considera un absoluto disparate, no solo contra el rey, sino más bien por antiespañola y sin fundamento real. Pero sus imágenes son tan potentes y se han instalado durante tanto tiempo y de forma tan definitiva en el imaginario popular y colectivo, que erradicarlas por completo va a ser muy complicado y, además de esto, ¿cuál sería el camino? «Si ponemos de relieve las brutalidades hechas en otros lugares se comprueba que el genocidio que nos imputan es muy matizable.